La playa de Almáciga, en Anaga

La playa de Almáciga está situada en las afueras del pueblo de Taganana, perteneciente al municipio de Santa Cruz de Tenerife, y es uno de los rincones más hermosos que quedan en la isla, en parte por su casi recóndita ubicación y en parte por su aspecto de lugar virgen, sin apenas signos de civilización. Pero esta belleza tiene como contrapunto sus fuertes corrientes y su entorno rocoso, aunque esto no impide que sea uno de los lugares preferidos por los amantes del surf.

Es altamente recomendable tener mucho cuidado en el agua si no estamos familiarizados con el entorno y el oleaje. También es importante respetar y cuidar el medio ambiente, especialmente por ser una zona natural protegida que se encuentra dentro del Parque Rural de Anaga.

Esta playa de arena negra es también un lugar con historia propia, y su nombre proviene de la antigua costumbre de los lugareños de embarcar desde aquí el vino elaborado en Taganana, desde donde partían con rumbo a Gran Bretaña.

Con una anchura media de 35 metros y una extensión aproximada de 300 metros, esta playa tinerfeña no posee paseo marítimo ni construcciones o servicios excepto las papeleras, un aparcamiento con 50 plazas y el servicio de limpieza, aunque gracias a su popularidad tiene un grado de ocupación medio durante la mayor parte del año, y en verano puede llegar a llenarse. Otro de los motivos para acercarse hasta aquí son los restaurantes cercanos a la playa, especializados en pescado fresco.

Para llegar hasta la playa de Almáciga en autobús podemos tomar la línea 246, y si tenemos vehículo propio por la carretera que más cerca pasa de ella es la TF-134, que va desde El Bailadero hasta la vecina Playa de Benijo.

Foto vía:  panageos