Descubriendo la Península de Jandía
La parte sur de la isla de Fuerteventura la conforma la Península de Jandía, un lugar paradisíaco por sus amplias playas de arenas doradas y aguas casi transparentes, y que muestra dos caras, una zona totalmente orientada al turismo y otra totalmente inhospita y casi innacesible, pero no menos hermosa.
Hay que señalar que esta península de Jandía fue en su momento (hace millones de años) una isla que acabó uniéndose con Fuerteventura, esa unión la conforma un istmo arenoso. Para poder llegar a Jandía, por la carretera FV-2 en dirección sur, y poder moverse por aquí es necesario recurrir al alquiler de coches en Fuerteventura, pues ya hemos dicho que hay lugares a los que no es fácil acceder.
Como decía al principio, tenemos que distinguir dos zonas bien diferenciadas. Así, en la coste este encontramos la zona más turística donde os destacamos Costa Blanca, que es una gran urbanización con hoteles, restaurantes y zonas comerciales en la que viven por cierto muchos ciudadanos extranjeros, principalmente alemanes.
Otro punto de gran movimiento turístico es Morro Jable. Antes era un pequeño pueblo pesquero con su pequeño puerto y sus embarcaciones, y ahora es un lugar con mucha vida, sobre todo en los alrededores del Paseo Marítimo. En su playa se encuentra el faro que sirve además de su función natural para separar la zona nudista de la zona normal.
Si seguimos avanzando, ya en dirección suroeste, el terreno se vuelve más abrupto y las carreteras son más complicadas, aunque nada que no se pueda superar en un vehículo todoterreno sin demasiado esfuerzo. Se puede llegar hasta Puerto de la Cruz, el punto más al extremo de esta península de Jandía, o bien desviarnos hacia la costa oeste y conocer la zona más virgen, más salvaje y más desconocida de esta isla Tranquila.
Aquí encontrarás las playas de Barlovento y la Playa de Cofete, extensos arenales que se alargan más de una veintena de kilómetros, poco frecuentados ya que no son de fácil acceso y en los que el mar se muestra bastante intranquilo, en contraste con la falta de ambiente en general en la playa. Un auténtico paraíso por descubrir.
Foto Vía Wolfgang Manousek
Conéctate